Diario de ... Un Demente "Ocultación"

Volvamos al bosque, tras un cerro.
Allí estaba Demetrio lleno de sangre, con un cuerpo decapitado y una cabeza follada por la traquea. Pruebas y más pruebas. Si le cogieran sería el violador de traqueas shemales, seguro que eso en el trullo no tiene muy buena prensa.
Demetrio no estaba nervioso, estaba en paz, cogió la cabeza y la metió a una bolsa que tenía en el coche. Pensó que podía enterrar el cuerpo, pero no tenía pala. Así que lo tapó con unas matas. Cogió el coche, fue a su casa. Se cambió de ropa, estaba cubierta de sangre, la metió en una bolsa. La cabeza la puso en  la nevera. Fue al coche nuevamente por el garaje, no había nadie. Con su pala de jardín, volvió al paraje de su última depravación. Empezó a cavar con la palita. Estuvo cerca de hora y media con el hoyo, metió al trans descabezado. Lo tapó sin mucho esfuerzo y puso las matas por encima.


Perfecto pensó, no se notaban huellas, prendió fuego a la bolsa de la ropa que llevaba. Le recordó a su primera muerte, pero ya no se sentía completo, tenía que continuar, perfeccionar la técnica. Ahora era un gañan pero seria todo un profesional, con práctica y dedicación. Se río malévolamente de pensar en sus atrocidades y en las que le quedaban.
Volvió a casa, y puso agua a hervir en una olla grande.
Metió la cabeza en la olla cuando el agua hervía.
Se fue a duchar mientras, en la ducha se acordó del travelo. Se sintió completo nuevamente, ahora ya con las pruebas escondidas.
Sacó el cráneo de la olla, limpio con su hueca mirada. Lo puso en su mesita se noche. Era su primer trofeo, pero no sería el último pensó.
Se echó a dormir rememorando su brutal decapitación, digna de película gore. ¿Cómo podría superarse?
Se le cerraban los ojos mientras contemplaba el cráneo del ladyboy.
Durmió plácidamente lo que le quedaba de madrugada.
(continuará)
Desde mi WC. El Sr. Deshecho